Carta publicada a petición de un socio sobre la actuación y procedimiento de BIMSA en el proyecto del Complejo Municipal de Horta y sus fases
Apreciados compañeros:
En Septiembre de 2014, por encargo del Instituto Barcelona Esports (IBE) el arquitecto realizó el proyecto de la 2ª fase del Complejo Municipal de Horta. El proyecto fue entregado al IBE después de ser auditado por una ingeniería externa que dio el visto bueno al proyecto, concluyéndose la relación contractual con el Ayuntamiento.
Posteriormente el IBE transfirió a BIMSA la gestión de la obra y en fecha 25/7/2016, BIMSA sacó el proyecto a concurso entre empresas constructoras. En la documentación del concurso se modificó, SIN EL CONOCIMIENTO NI AUTORIZACIÓN DEL AUTOR DEL PROYECTO, el Plan de Trabajo y el Presupuesto, eliminandose todo el capítulo 1 de derribos, y otras importantes partidas necesarias para la correcta ejecución de las obras.
La empresa BIMSA encargó una nueva auditoría del proyecto ya auditado a otra ingeniería, la cual hizo una segunda revisión del proyecto pero al mismo tiempo procedió a su modificación, con lo que juez y parte corrió a cargo de la misma empresa, práctica totalmente capciosa e irregular.
El resultado de semejante despropósito fue un nuevo documento que eliminó 200 partidas del presupuesto original, añadió 300 nuevas, y modificó 60 planos.
La empresa BIMSA citó al autor original del proyecto para que firmase el nuevo documento que recogia todo este desvarío, pretensión que obtuvo una contundente negativa. El objetivo no era otro que el de esconder la tropelía de que la modificación del proyecto se había realizado a gusto de la auditora y evidentemente de BIMSA
La ingeniería en cuestión mostró una mínima conducta ética y una bajísima cultura arquitectónica ya que aprovechó esta condición de juez y parte para modificar apartados sustanciales del diseño de un proyecto que en su día ganó un concurso de arquitectura de ámbito nacional.
La empresa BIMSA, ante tal desajuste decide enmendar el error, desestimando el nuevo trabajo realizado por la ingeniería auditora.
La empresa BIMSA saca a concurso los trabajos de dirección ejecutiva y facultativa, pero esta vez con la documentación original completa, o sea la entregada por el autor del proyecto, documentación que difiere en cuestiones sustanciales con la documentación entregada con anterioridad a las empresas constructoras. El desastre de la obra está servido, encargan una dirección de obra con una documentación distinta de la que tiene la empresa constructora.
La empresa BIMSA licita aparte los trabajos de derribo mediante un nuevo proyecto encargado a una ingeniería, utilizando parte de planos y mediciones del proyecto original, sin la autorización del autor del proyecto y cambiando la firma de los documentos originales por los de la ingeniería.
En el concurso para la Dirección Facultativa se presenta la citada ingeniería auditora, la que se había prestado a este sucio juego. El resultado es que esta ingeniería, en el capítulo de JUICIOS DE VALOR aparece mejor puntuada que el equipo redactor del proyecto, sin justificar el detalle de las puntuaciones.
Se ha hecho conocer estas anomalías mediante escrito a BIMSA, de la que no se ha recibido la más mínima respuesta.
Socio núm. 031
En Barcelona, Noviembre de 2016
