Casi una decena de intervenciones artísticas que transformarán el edificio marcan la programación del 2020
Publicado en El Periódico el 4 de Febrero de 2020
Igual que Gregorio Samsa, el pabellón Mies van der Rohe se despierta algunas mañanas convertido en otra cosa. Tiene debilidad por la transformación. Por la metamorfosis. Algunas veces se convierte en algo distinto por medio del sonido. Otras, por medio de la luz. A veces por medio de la palabra. Es, digámoslo con claridad, un pabellón transformista. Artistas de todos los lugares han pasado por allí y han operado su particular idea de una operación estética; el pabellón, gustoso, se deja hacer. Hace dos años, Spencer Finch dispuso 15 rocas en el estanque que evocaban el templo del reposo del dragón de Kioto, y que trazaban un vínculo entre lo moderno y lo japonés. Hace cuatro, Peter Downsbrough sembró el espacio con siete discretas palabras –humildes verbos, adverbios y preposiciones– que interactuaban sutilmente con la construcción. Pues bien, le espera un año kafkiano o ‘samsiano’ al pabellón de Montjuïc: las intervenciones son la columna vertebral de la programación del 2020 presentada este martes.
El pabellón tiene debilidad por la transformación, y algunos días, después de un sueño intranquilo, se despierta convertido en otra cosa
“Serán intervenciones que tendrán en cuenta lo que ha significado y lo que significa el pabellón”, explicó durante la presentación Ivan Blasi, comisario de premios y programas. La primera intervención –transformación– se podrá ver este mismo sábado, cuando el maestro cirujano de turno, Mario Pasqualotto, inflija un sueño intranquilo al pabellón y lo despierte convertido “en un plano dibujado por medio de la luz”, algo que estará entre la “representación pictórica” y el “homenaje a Mies”, una operación que resultará en “una visión poética y romántica de todo el edificio”, según explicó. Big Bang Building Light!, con el entusiasmo que supone ese punto de exclamación, es la aportación de la institución al Llum BCN, el festival de artes lumínicas que tendrá lugar la próxima semana en Barcelona, y una muesca literalmente luminosa en el ya largo historial de transformaciones del edificio.PUBLICIDAD
95.000 visitas
El programa incluye casi una decena de intervenciones que tendrán lugar entre febrero y noviembre. El pabellón se convertirá a la sazón en uno de los pisos bordeleses premiados el año pasado con el galardón que otorga la institución, o en un lugar donde imaginar qué esconde por dentro el imponente muro de ónix, o en un espacio para hacer visible la figura y aportación de Lilly Reich al pabellón –y probablemente a la historia de la arquitectura–. Para el que no se acuerde, o no lo sepa, Reich es coautora del pabellón junto a Van der Rohe. “Vamos a reconstruir dos vitrinas tipo que hizo para los palacios noucentistas de la Exposición Internacional de Barcelona –explicó la responsable del proyecto, la arquitecta Laura Martínez de Guereñu– con la idea de poner en valor su trabajo y mostrar su influencia en todo esto”. Dijo que no transformará la estructura, pero sí la experiencia. Desarrollado bajo el paraguas de la Beca Lilly Reich para la Igualdad en la Arquitectura, ‘Re-enactment’ –así se llama el proyecto– es en palabras de su autora “un posicionamiento político” y “una obra de justicia poética”.
La directora de la fundación, Anna Ramos, anunció que el pabellón abrirá gratis al público el primer domingo de cada mes
La directora de la Fundació Mies van der Rohe, Anna Ramos, presidió un acto en el que explicó que 95.000 personas visitaron el pabellón en el 2019, 9.000 más que el año anterior, y dijo que confía en dar la buena noticia de que habrán sido 100.000 dentro de un año. Además, anunció que el edificio abrirá gratis al público el primer domingo de cada mes. El programa de este año incluye una cincuentena de actividades, exposiciones, premios y actividades educativas además de las intervenciones. Además de lo ‘samsiano’. Lo kafkiano. Lo transformador.