Un nuevo barrio de 5.000 vecinos en las tres chimeneas

Un nuevo barrio de 5.000 vecinos en las tres chimeneas

Los Ayuntamientos de Sant Adrià de Besòs y Badalona aprueban el plan director que permite impulsar 1.700 pisos en el litoral

Publicado en La Vnaguardia el 5 de agosto de 2020 | Fede Cedó

Los ayuntamientos de Sant Adrià de Besòs y Badalona han dado un nuevo impulso al Plan Director Urbanístico (PDU) de las tres chimeneas con la aprobación inicial del proyecto que supone la transformación de 32 hectáreas en el litoral, las únicas que quedan sin urbanizar en el ámbito metropolitano. Todo ello generará un nuevo barrio y actividad económica, nuevos espacios públicos, equipamientos e infraestructuras y un incremento previsto del 15% de la población adrianense, que aumentará con 5.000 nuevos vecinos.

El ámbito de las 32 hectáreas está delimitado por la franja comprendida entre la vía del tren y el mar, y el frente que va desde la desembocadura del Besòs hasta la parte final del espacio de las tres chimeneas, incluida la zona de equipamientos, el parque Litoral y las antiguas zonas industriales.

El documento presentado por el Departament de Territori i Sostenibilitat de la Generalitat propone, además del nuevo barrio de 1.702 viviendas, destinar el 30% a actividad económica, 82.600 m² de oficinas, 23,600 m2de comercios, un hotel de cuatro estrellas con 250 habitaciones repartidas en edificios de 10, 13 y en algún caso hasta 19 plantas. La zona que se plantea tiene aspectos que la asemejan al 22@ del Poblenou.

La propuesta de ordenación dibuja un modelo de edificación denso y compacto, que se concentrará en torno a la avenida Eduard Maristany, que también acogerá el nuevo vial de prioridad para peatones, en la parte más próxima al litoral para liberar al máximo el terreno para zonas verdes y equipamientos en el entorno más cercano a las tres chimeneas y la sala de las turbinas, que se mantendrán en primera línea de mar como elementos de referencia metropolitana. En esta zona se plantea un modelo de edificios de planta baja y tres pisos para usos de actividad económica y vivienda en sentido perpendicular a la avenida Maristany.

Viviendas | El PDU plantea un modelo de edificios de planta baja y tres pisos en perpendicular al mar

Ante el incremento de movilidad también se planifica la construcción de nuevos viales y la prolongación del Trambesòs hasta el puerto de Badalona, una actuación que ya está aprobada en el plan de infraestructuras del transporte público.

La transformación urbanística será del 47% en techo residencial y el 53% para actividad económica, con 181.884 m² de zonas verdes y equipamientos. El PDU también destina un 10% de techo a usos hoteleros, el equivalente a 17.160 m².

La ordenación volumétrica permite distribuir una extensión aproximada de 12 hectáreas y una longitud aproximada de un kilómetro para un parque entre la playa y la ciudad, que dará continuidad al parque fluvial del Besòs y engloba el parque Litoral (parque Marina-Besòs). Este nuevo parque acaba enlazando con el entorno inmediato de las tres chimeneas y con el paseo marítimo que ya existe frente al barrio de la Mora en Badalona.

En el litoral, el PDU también propone el traslado hacia el interior del actual colector interceptor de Levante que, por su situación, constituye un obstáculo para la recuperación del frente marítimo y el futuro desarrollo urbanístico de la zona.

Zona verde | Sant Adrià de Besòs ganará un parque de 12 hectáreas y un kilómetro de longitud

El elemento central del proyecto urbanístico son las tres chimeneas y la sala de turbinas, que podrían albergar un gran equipamiento. “Un hub internacional de conocimiento para el desarrollo sostenible y la paz”, según avanza la plataforma para la conservación de las tres chimeneas. Precisamente, la plataforma integra las voces discrepantes del proyecto. La nueva propuesta consideran que generará “un barrio segregado” de la trama urbana con una densidad próxima a los 20.000 habitantes por km² y con nuevos vecinos a 400 metros de la central eléctrica y la desembocadura, una zona muy sensible que “debería estar protegida” de las agresiones medioambientales, como entienden que será el desarrollo de la zona de las tres chimeneas.