Ahir es va inaugurar l’exposició Le Corbusier. Un atles de paisatges moderns, que tindrà lloc fins l’11 de maig al CaixaForum Barcelona.Ayer se inauguró la exposición Le Corbusier. Un atlas de paisajes modernos, que tendrá lugar hasta el 11 de mayo en el CaixaForum Barcelona.
A continuació podreu trobar una recopilació dels articles publicats en els diaris.
Publicat el 28 de gener de 2014 a El País
El arquitecto que odiaba al MoMA | José Ángel Montañés
La maqueta que el arquitecto francosuizo Charles Édouard Jeanneret-Gris, Le Corbusier (1887-1965), realizó en 1931 con el fin de participar en el concurso para construir los palacios de los soviets en Moscú, símbolo del incipiente triunfo del comunismo, acabó, por el azar de la historia, en el Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMA). Se la vendió el propio arquitecto en una operación que acabó mal, ya que Le Corbusier siempre aseguró que el museo no se la había pagado. Por eso, repitió en más de una ocasión que odiaba al MoMA. El tiempo lo cura todo y ha sido este museo neoyorquino quien ha organizado la última gran retrospectiva junto a la Foundation Le Corbusier de París. Le Corbusier. Un atlas de paisajes modernosse centra en su preocupación por el paisaje que desarrolló a lo largo de seis décadas de trabajo, muchos de ellos no realizados.
La conflictiva maqueta ha viajado a Barcelona con otros 214 objetos: dibujos, fotografías, cuadernos de viaje, pinturas, esculturas, muebles, maquetas, sus incontables planos —muchos de ellos nunca expuestos— y los multicolores croquis a mano alzada que realizaba en rollos de papel durante las conferencias que realizaba por medio mundo, en las que intentaba convencer al público de la validez de sus planteamientos. Un papel que luego se llevaba a casa y que por eso se puede exponer ahora.
Publicat el 29 de gener de 2014 a La Vanguardia
Casi todo sobre Le Corbusier | Llàtzer Moix
Le Corbusier, arquitecto inspirado por las máquinas, los automóviles y los aviones, era también un entregado observador del paisaje natural. Lo primero es del dominio público desde que el creador suizo empezó a despuntar, hace cosa de un siglo, para acabar convirtiéndose en uno de los grandes arquitectos del siglo XX. Lo segundo constituye un argumento vertebral, y en cierta medida sorprendente, de la exposición Le Corbusier. Un atles de paisatges moderns, que ayer se inauguró en las dependencias de CaixaForum, donde permanecerá hasta el 11 de mayo.
No es la primera exposición de Le Corbusier que llega a Barcelona. En 1988 se vio en la Fundació Miró y la Virreina La aventura de Le Corbusier, una muestra impulsada por el Centro Pompidou en 1987 con motivo del centenario del arquitecto. Pero esta ofrece una excelente ocasión para acercarse al creador de la villa Savoie de Poissy, la iglesia de Ronchamp, la ciudad de Chandigarh en India, l’Unité d’Habitation en Marsella y otras obras clave de la arquitectura moderna.
Publicat el 29 de gener de 2014 a La Razón
La Barcelona que soñó Le Corbusier | Víctor Fernàndez
A veces habría que imaginar cómo serían las ciudades si hubiéramos dado libertad a los artistas para rediseñarlas. Barcelona es un buen ejemplo. Si a finales del XIX se perdió la oportunidad de tener la Torre Eiffel al rechazar la iniciativa del ingeniero francés, en el siglo pasado fue Le Corbusier el que se encontró con la negativa de las autoridades locales.
CaixaForum en Barcelona acoge desde ayer una exposición dedicada a Charles-Édouard Jeanneret, Le Corbusier para la historia del arte. Es un completo paseo por la obra del arquitecto en todas sus facetas, como la de diseñador o pintor. La muestra también permite conocer algunas iniciativas que no pasaron del plano. Entre ellas está la Barcelona soñada por Le Corbusier, una interesante propuesta denominada «Plan Macià». Este genio suizo, nacionalizado francés, realizó el proyecto junto con Pierre Jeanneret y el histórico Grupo de Arquitectos y Técnicos Catalanes para la Realización de la Arquitectura Contemporánea (Gatcpac).
Publicat el 29 de gener de 2014 a El Mundo
Sueños y fracasos de Le Corbusier | Vanessa Graell
El vértigo al borde del precipicio, los senderos zigzagueantes de las montañas, las sombras en la profundidad del valle, la luz deslumbrante del horizonte dibujado por el mar, los recovecos del jardín… Le Corbusier concebía los edificios como un paseo por la naturaleza, un deambular arquitectónico a través de rampas, curvas, terrazas y ventanas panorámicas. Descubrió la esencia y la belleza del paisaje leyendo obsesivamente a Rousseau. Desde su primer edificio, Villa Fallet, que diseñó a los 20 años en las colinas de su Suiza natal, quiso pasear por la arquitectura, inventando nuevas formas, nuevos paisajes urbanos.
Y soñó con inventar nuevas ciudades. En su polémico plan para París de 1922 (que causó escándalo pero le hizo famoso)sólo dejó en pie la Tour Eiffel, el Louvre, la Ópera y algunas iglesias: destruyó el cascó antiguo y llenó la ciudad de rascacielos de cristal. De Barcelona borró el Gótico y el barrio Chino para dibujar bloques de edificios racionalistas alrededor del Eixample y levantar tres rascacielos frente al mar. Proyectos provocadores que sabía que nunca llegarían a construirse. Los sueños, los fracasos y las obras maestras de Le Corbusier se materializan en la exposición Un atlas de paisajes modernos, que tras verse en el MoMAde Nueva York (recibió 405.000 visitantes) aterriza en CaixaForum Barcelona para viajar después a Madrid.
A continuación encontraréis una recopilación de los artículos publicados en los periódicos.
Publicado el 28 de enero de 2014 en El País
El arquitecto que odiaba al MoMA | José Ángel Montañés
La maqueta que el arquitecto francosuizo Charles Édouard Jeanneret-Gris, Le Corbusier (1887-1965), realizó en 1931 con el fin de participar en el concurso para construir los palacios de los soviets en Moscú, símbolo del incipiente triunfo del comunismo, acabó, por el azar de la historia, en el Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMA). Se la vendió el propio arquitecto en una operación que acabó mal, ya que Le Corbusier siempre aseguró que el museo no se la había pagado. Por eso, repitió en más de una ocasión que odiaba al MoMA. El tiempo lo cura todo y ha sido este museo neoyorquino quien ha organizado la última gran retrospectiva junto a la Foundation Le Corbusier de París. Le Corbusier. Un atlas de paisajes modernosse centra en su preocupación por el paisaje que desarrolló a lo largo de seis décadas de trabajo, muchos de ellos no realizados.
La conflictiva maqueta ha viajado a Barcelona con otros 214 objetos: dibujos, fotografías, cuadernos de viaje, pinturas, esculturas, muebles, maquetas, sus incontables planos —muchos de ellos nunca expuestos— y los multicolores croquis a mano alzada que realizaba en rollos de papel durante las conferencias que realizaba por medio mundo, en las que intentaba convencer al público de la validez de sus planteamientos. Un papel que luego se llevaba a casa y que por eso se puede exponer ahora.
Publicado el 29 de enero de 2014 en La Vanguardia
Casi todo sobre Le Corbusier | Llàtzer Moix
Le Corbusier, arquitecto inspirado por las máquinas, los automóviles y los aviones, era también un entregado observador del paisaje natural. Lo primero es del dominio público desde que el creador suizo empezó a despuntar, hace cosa de un siglo, para acabar convirtiéndose en uno de los grandes arquitectos del siglo XX. Lo segundo constituye un argumento vertebral, y en cierta medida sorprendente, de la exposición Le Corbusier. Un atles de paisatges moderns, que ayer se inauguró en las dependencias de CaixaForum, donde permanecerá hasta el 11 de mayo.
No es la primera exposición de Le Corbusier que llega a Barcelona. En 1988 se vio en la Fundació Miró y la Virreina La aventura de Le Corbusier, una muestra impulsada por el Centro Pompidou en 1987 con motivo del centenario del arquitecto. Pero esta ofrece una excelente ocasión para acercarse al creador de la villa Savoie de Poissy, la iglesia de Ronchamp, la ciudad de Chandigarh en India, l’Unité d’Habitation en Marsella y otras obras clave de la arquitectura moderna.
Publicado el 29 de enero de 2014 en La Razón
La Barcelona que soñó Le Corbusier | Víctor Fernàndez
A veces habría que imaginar cómo serían las ciudades si hubiéramos dado libertad a los artistas para rediseñarlas. Barcelona es un buen ejemplo. Si a finales del XIX se perdió la oportunidad de tener la Torre Eiffel al rechazar la iniciativa del ingeniero francés, en el siglo pasado fue Le Corbusier el que se encontró con la negativa de las autoridades locales.
CaixaForum en Barcelona acoge desde ayer una exposición dedicada a Charles-Édouard Jeanneret, Le Corbusier para la historia del arte. Es un completo paseo por la obra del arquitecto en todas sus facetas, como la de diseñador o pintor. La muestra también permite conocer algunas iniciativas que no pasaron del plano. Entre ellas está la Barcelona soñada por Le Corbusier, una interesante propuesta denominada «Plan Macià». Este genio suizo, nacionalizado francés, realizó el proyecto junto con Pierre Jeanneret y el histórico Grupo de Arquitectos y Técnicos Catalanes para la Realización de la Arquitectura Contemporánea (Gatcpac).
Publicado el 29 de enero de 2014 en El Mundo
Sueños y fracasos de Le Corbusier | Vanessa Graell
El vértigo al borde del precipicio, los senderos zigzagueantes de las montañas, las sombras en la profundidad del valle, la luz deslumbrante del horizonte dibujado por el mar, los recovecos del jardín… Le Corbusier concebía los edificios como un paseo por la naturaleza, un deambular arquitectónico a través de rampas, curvas, terrazas y ventanas panorámicas. Descubrió la esencia y la belleza del paisaje leyendo obsesivamente a Rousseau. Desde su primer edificio, Villa Fallet, que diseñó a los 20 años en las colinas de su Suiza natal, quiso pasear por la arquitectura, inventando nuevas formas, nuevos paisajes urbanos.
Y soñó con inventar nuevas ciudades. En su polémico plan para París de 1922 (que causó escándalo pero le hizo famoso)sólo dejó en pie la Tour Eiffel, el Louvre, la Ópera y algunas iglesias: destruyó el cascó antiguo y llenó la ciudad de rascacielos de cristal. De Barcelona borró el Gótico y el barrio Chino para dibujar bloques de edificios racionalistas alrededor del Eixample y levantar tres rascacielos frente al mar. Proyectos provocadores que sabía que nunca llegarían a construirse. Los sueños, los fracasos y las obras maestras de Le Corbusier se materializan en la exposición Un atlas de paisajes modernos, que tras verse en el MoMAde Nueva York (recibió 405.000 visitantes) aterriza en CaixaForum Barcelona para viajar después a Madrid.